La Cuaresma consta de 40 días, inicia el Miércoles de Ceniza (02 de marzo de 2012) y termina el Jueves Santo (14 de abril de 2012). La cuaresma consta de seis Viernes de Cuaresma (04, 11, 18 y 25 de marzo; 01, 08 de abril) y el Viernes Santo se celebra el 15 de abril de 2022.
Cuaresma y Semana Santa en Santiago Atitlán, siendo un lugar pintoresco, antes del año 2012, las cofradías y la iglesia Católica realizaban conjuntamente una variedad de actividades sincréticas religiosa (Católica-Maya) durante la Cuaresma y Semana Santa.
En este año 2022, las cofradías realizan sus actividades tanto dentro del templo de la iglesia Católica, como las procesiones en las calles del pueblo durante los días Viernes de Cuaresma con la Procesión de la imagen de Jesús Nazareno, y Viernes Santo con la Procesión de la imagen del Señor Sepultado y Santo Entierro, así mismo realizan actividades propiamente de la cultura Tz’utujil.
También, las iglesias evangélicas tienen sus propias actividades espirituales durante la Semana Santa en sus propios templos, así como diferentes grupos organizados del pueblo, quienes se unen a ciertas actividades como la realización de las alfombras hechas básicamente con aserrín pintados y la realización de monumentos usando ramas de cipreses, corozos y frutas traídos de la Costa Sur, en la tierra ancestral Tz’utujil.
De manera espiritual y en base bíblico, según el presbítero Francisco Chocoj Cap (2022), de la iglesia Católica, Parroquia Santiago Apóstol del municipio de Santiago Atitlán, comparta el siguiente mensaje:
La Cuaresma es un tiempo que nos sitúa en un ambiente de espiritualidad y tradiciones. Cuaresma significa cuarenta y su origen es bíblico: Los cuarenta días del Diluvio, los cuarenta días que estuvo Moisés en el Sinaí para recibir Los Mandamientos, los cuarenta días de Elías en el monte Horeb, los cuarenta años en que el pueblo de Israel estuvo en el desierto y los cuarenta días en que Jesús oró y ayunó en el desierto. Aparece más de cien veces el número 40 en la Biblia. Es el tiempo en que Dios pone a prueba a su pueblo con vistas a la conversión. Son cuarenta días de preparación que lleva a la celebración de la Semana Mayor o Semana Santa. En cuaresma se invita a dedicarle más tiempo a la oración, a practicar obras en beneficio del prójimo y a reflexionar los sufrimientos de Jesús, en este caso están las Estaciones del Vía Crucis.
La Cuaresma tiene cinco domingos más el Domingo de Ramos. Las lecturas de las celebraciones traen los temas de la conversión, el pecado, la penitencia y el perdón.
La Cuaresma lleva a la celebración del Santo Triduo Pascual. El Triduo incluye el JUEVES SANTO con la Celebración de la Última Cena o la Cena del Señor, el VIERNES SANTO, único día del año en que no se celebra la Misa en toda la Iglesia Católica porque es un día de duelo por la Crucifixión y Muerte del Salvador y en vez, se celebran los Oficios de la Pasión y lo propio de este día es el Vía Crucis, para contemplar los sufrimientos de Jesús y el misterio de todo sufrimiento y dolor humano; también se venera en este día, de una forma especial la Cruz de nuestro Señor. El SÁBADO SANTO, lo que antiguamente se llamaba sábado de gloria, es un tiempo de silencio y meditación en espera del día más importante, el Domingo de Pascua de Resurrección. Ya desde el Sábado Santo por la noche se tiene la Vigilia más relevante, la VIGILIA PASCUAL. Es una celebración muy amplia y solemne en el que se hace un recorrido, a través de la Historia Sagrada, comenzando con la lectura del libro del Génesis hasta llegar a Jesucristo, son en total siete lecturas.
El DOMINGO DE RESURRECCIÓN es un día especialísimo en el que todo cristiano debe de asistir a la Celebración y revivir la Resurrección de Cristo, con alegría, júbilo y verse al mismo tiempo enviado a llevar esta buena noticia a todas partes, testimoniar que Jesucristo vive, que ha vencido a la muerte y al pecado, para traernos vida en abundancia.
Un signo de la Pascua de Resurrección es la Paz, Jesucristo en el momento en que se manifestó a sus apóstoles resucitado les infundió su paz, es un don de Dios tan ansiado en nuestros días y que todos nosotros debemos de pedirle al Creador y a la vez poner todo nuestro esfuerzo para construirla en nuestro entorno. Jesús resucitó para que todos nosotros seamos hermanos y seamos misericordiosos como él nos tuvo misericordia.
Después del Domingo de Resurrección, vienen los cincuenta días festivos de Pascua. A los cuarenta días de la Resurrección se celebra la Ascensión (Jesús asciende al Cielo) y a los cincuenta se concluye, con la Solemnidad de Pentecostés (la venida del Espíritu Santo). Con esto se cierra este ciclo de profunda espiritualidad y tradiciones que nos deben edificar para dar frutos, frutos en abundancia y que permanezcan, como son los deseos de Jesús.
Extrañamos lo que ha sido la Cuaresma y Semana Santa en años anteriores a la pandemia, la cual ha venido a afectar al orbe entero. Pero como diría el Papa Francisco: “No nos cansemos de hacer el bien” tema central de la Cuaresma 2022. Todo lo que podamos hacer si favorece al bien propio y de los demás, adelante, hay que vencer al mal haciendo el bien.
Que podamos vivir una Santa Cuaresma y Semana Mayor con las debidas precauciones, ayudando a los enfermos y más necesitados según nuestras posibilidades y la generosidad de nuestro corazón.
Archivo: Unidad de Centro Cultural de Investigación, Aprendizaje Lingüístico y Archivo General del Antiguo Reino Tz’utujil de la Municipalidad de Santiago Atitlán.
